“Una buena secretaria ejecuta innumerables tareas: clasifica los trabajos que hace, las cartas escritas y recibidas, conoce las direcciones y se convierte en una fuente vital de información para todos”.
Con el paso de los años, estas profesionales han cobrado cada vez más protagonismo en los asuntos corporativos. Y es que desde hace tiempo dejaron de tener entre sus tareas primordiales redactar documentos, contestar llamadas telefónicas y enviar faxes. Hoy manejan varios idiomas y están altamente preparadas para crear, innovar e implementar iniciativas; preparar presentaciones de productos o servicios; concertar reuniones; realizar eventos, y atender a proveedores y clientes.
En la terminología tradicional, se denomina secretaria a la persona que escribe la correspondencia, extiende las actas de las reuniones, resuelve los asuntos de trámite y custodia los documentos de una oficina. Pero en los últimos tiempos el concepto de secretaria ha cambiado notablemente: ahora ha pasado a ser la asistente perfecta de su jefe, hasta el punto de ser capaz incluso de asumir responsabilidades de éste con credibilidad. Dentro de las cualidades personales más importantes que una secretaria debe poseer son las siguientes: Discreta, Proactiva, Puntual, Responsable, Cooperativa, Educada, Honesta entre otras.
Con la participación de 50 Servidores Públicos de distintas instituciones se dio inicio al Seminario Habilidades y Arte de la Secretaría Ejecutiva, gracias a la iniciativa de la Dirección General de Carrera Administrativa y a la colaboración de la licenciada Marta Baquerizo, profesora de la facultad de Administración de Empresas de la Universidad de Panamá, que con sus conocimiento enriqueció a la audiencia.