Un líder es aquel que conoce el camino, hace el camino y muestra el camino. – John Calvin Maxwell
Un líder es una persona que influye en un colectivo de personas hacia la consecución de un objetivo, mientras el mando es el arte de generar a un grupo de personas, a actuar hacia el alcance de un objetivo común. Los estilos de mando propiciarán el impacto a la organización. El líder tendrá que optar qué enfoque es más acertado al estilo de mando, de acuerdo a la situación para el éxito del equipo.
Con la asistencia de 47 servidores públicos de distintas instituciones, se llevó acabo el seminario “Estilos de Liderazgos”, bajo la conducción del magister Quelso Núñez, coordinador de Capacitaciones a Nivel Nacional del Ministerio de Seguridad.
Existen actividades modulares de un buen líder que son: La selección del personal, de acuerdo a su experiencia, inteligencia y determinación, Establecer las expectativas definiendo los pasos a seguir, Motivar al personal apoyándolos a superar sus debilidades y procurar capacitar a su personal proporcionando las herramientas para crecer y ser ascendida.
Así mismo, es importante señalar que existen 13 estilos de liderazgo en dirección de equipos; Liderazgo transaccional, Liderazgo autocrático, Liderazgo transformacional, Liderazgo de Servidumbre, Liderazgo carismático, Liderazgo democrático, Liderazgo de no intervención, Liderazgo burocrático, Liderazgo Informal, Liderazgo constructivo y funcional, El dirigente del revólver, El dirigente de la vieja escuela y El líder de la curva.
Podemos observar que todos los estilos de liderazgo tienen aforo en las instituciones, desde los departamentos de Recursos Humanos, y las jefaturas, son los que debe definir el tipo de liderazgo más asertivo.
En otras situaciones, la inflexibilidad y los altos niveles del control ejercido pueden desmoralizar al personal y pueden disminuir la capacidad de la organización de reaccionar al cambio de circunstancias externas.